¿Quién no ha soñado con el colegio de sus sueños? Si me toca la lotería haría mi cole en la montaña y sería...
Se trata precisamente de eso, de convertir nuestro cole en el cole que querríamos para nuestros hijos.
Aquí están los representantes pedagógicos del centro. Miraros bien, reconoceros. Y trabajar juntos, respetaros mucho porque ahora este proyecto sois vosotros.
Los que estáis aquí tenéis un papel distinto del resto de compañeros. Sabemos que hay algunos que no están por circunstancias personales, pero que les gustaría compartir con vosotros este proyecto. Tenedlos también en cuenta, incluidlos, porque todos vosotros formáis una familia, un equipo, y es absolutamente necesario para el proyecto que tenemos entre manos.
Los que estáis aquí habéis experimentado de forma autodidacta un cambio que comenzó hace ya unos años y que estuvo provocado por una voz interior que en un momento determinado os dijo: así no... esto así no me hace feliz.
Y buscando ese equilibrio ético, personal y profesional porque nuestro trabajo es personal también, empezasteis a buscar respuestas por vuestra cuenta, a contagiar y contagiarse de las búsquedas de los otros, a crear redes con los otros, en vuestro tiempo libre, a hacer de esa búsqueda vuestro propósito más deseado. Y ahora estáis aquí... este es realmente un momento mágico y trascendental. Estáis ya en el cambio y aunque podemos sentirnos inseguros, vosotros sabéis que el miedo al cambio no construye nada, sólo nos paraliza, el miedo lleva a la ira y la ira al lado oscuro... vuestro papel es el de contagiar a los demás, con paciencia, con ilusión, con generosidad... crear redes.
Y después están los otros, los del lado oscuro, sabemos quiénes son, qué hacen. Pero ellos son también importantes en este proceso, ellos son necesarios porque son nuestro reto, son nuestro motivo para convertirnos en expertos, en idealistas irracionales a veces, en motivados.
El papel que juegan es fundamental, van a pedir razonablemente que vayáis despacio y eso os va a obligar a marcar un ritmo, a consensuar los pasos... eso es bueno. Van a pedir ayuda y eso os va a obligar a buscar más formación de distintos lugares. Van a decir no, porque no, y eso os va a obligar a definir POR FIN qué colegio sois, hacia dónde vais y reestructurar toda la filosofía pedagógica de vuestro centro.